Mónica Luengo Añón, Coordinadora del Expediente de la Candidatura, Historiadora y Arquitecta paisajista especializada en Patrimonio de la Humanidad analiza los condicionantes físicos de este paisaje dentro de la ciudad de Madrid; un espacio cambiante pero inmutable en su esencia, un corazón verde que desde su origen ha sabido integrar cultura y naturaleza.
Explica el origen del Paseo del Prado, que de remonta al siglo XVI, y anima al profesorado a buscar su razón de ser ligada a la suave topografía de la capital, la relacción con el rio Manzanares y los arroyos que afloraban entre las lomas y el caserío.